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Tips para espacios pequeños

Los espacios pequeños son el desafío que invade al usuario en cada ambiente, intentando optimizar lugares estancos compartiendo funciones para simplificar.
Los trucos de la arquitectura nos despiertan la curiosidad y nos brindan soluciones que podemos adaptar a nuestro cotidiano.

Los espacios estancos son escenarios de grandes soluciones de guardados o exhibición.
El tablero melamínico es el material por excelencia para poder resolver estos acertijos, ya que por su versatilidad se adapta modularmente ad-hoc.
Espacios bajo escaleras o bajo entrepisos son ideales emplear esta tipología.

Rincones únicos se trasforman en lugares de aprovechamiento de guardado. Cajoneras, módulos, mesas, son parte de una arquitectura que compone el espacio.
La ventaja de adaptar cada mueble a un color y textura a través con un material industrial, tablero melamínico, otorga un valor agregado para el design ofreciendo al usuario la oportunidad de elegir el estilo de su propia casa.

Módulos divisorios como parte de cerramientos virtuales, ayudan a sectorizar sectores y son muros temáticos con funciones de armado según necesidad del usuario.

El mejor recurso del tablero melamínico es la optimización dando respuesta a cada problemática, creando planos de apoyo rebatibles, guardado corredizo, con la posibilidad de sustitución de placas variando color y texturas cuando el usuario lo desee.

Un espacio pequeño se puede convertir en un mundo con la astucia de la creatividad para generar entorno y equipamiento en un solo concepto.

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